Linux es uno de los tres sistemas operativos más populares del momento, aunque aun siendo conocido por la mayoría de usuarios, su utilización no está tan extendida, siendo bastante inferior al respecto de Windows y también de Mac OS X, aunque en menor medida de este último. Una de las mayores pegas para los usuarios interesados en pasarse a Linux es la carencia de algunas aplicaciones que pueden ser vitales para su uso particular, siendo Adobe Photoshop uno de los grandes destacados.

Pero eso no quiere decir que Linux esté exento de alternativas, pues para este uso en particular cuenta con algunas aplicaciones bastante funcionales, como el ultra conocido The Gimp, o Pinta, la aplicación de la que vamos a hablar hoy.  Pinta es una aplicación para Linux que surgió a partir del código de Paint.Net, una aplicación de retoque gráfico que solo está disponible para Windows.

Pinta está basado en las librerías de GTK y Cairo, por lo que aunque es una aplicación exclusiva para Linux, puede ser usada en Windows y Mac OS X si se instalan dichas librerías, aunque en el caso de Mac también sería necesaria la instalación de Mono for Mac.

La interfaz de Pinta es prácticamente idéntica a la de Paint.Net, una interfaz en una sola ventana con la barra de herramientas a la izquierda, las miniaturas de las imágenes abiertas en la esquina superior derecha y ventanas flotantes para mostrar algunas de las principales herramientas y opciones, estas herramientas flotantes se muestran en una única ventana, por lo tanto no tendremos una ventana abierta para cada opción. Estas ventanas flotantes se pueden añadir y eliminar al gusto, pudiendo conseguir una interfaz totalmente personalizada.

En cuanto a funciones va bien servido, pues podemos trabajar con capas, añadir efectos y filtros y algunas opciones interesantes. Aunque hay algunas opciones que pueden parecer un tanto básicas, combinando su uso podremos lograr algunos resultados más que interesantes. También cabe destacar que el desarrollo de Pinta lleva algún tiempo parado y no es probable que se retome, aunque el código está liberado para cualquier interesado. Pero lo cierto es que Pinta se posiciona como una gran herramienta muy intuitiva y funcional al mismo tiempo.