¿Eres adicto a Internet? Pues tienes que saber que  puedes sufrir daños estructurales en tu cerebro, lo mismo que les ocurre a los alcohólicos o los adictos al juego. Es lo que se extrae de los resultados de un estudio realizado a 17 adolescentes que sufren adicción a Internet, en el sentido más negativo del término. Los investigadores han estudiado cómo su cerebro sufría modificaciones estructurales y funcionales en determinadas partes. Los adictos a Internet son aquellos que sufren un desorden denominado Internet Addiction Disorder (IAD).

Adicto a Internet

Éstas modificaciones afectaban principalmente a las zonas en las que se regula la organización. De hecho, y simplificando mucho los términos médicos del estudio, éste viene a decir que los jóvenes con IAD tienen menos cantidad de materia blanca en el cerebro. Por esta razón, pueden desarrollar desórdenes cerebrales a la hora de generar y procesar las emociones, prestar atención o tomar decisiones.

La adicción a Internet no es una enfermedad como tal, pues aún no ha sido considerada así por los profesionales de la psiquiatría, aunque sí es un desorden que como cualquier adicción que impide al individuo disfrutar de la vida cuando no tiene algo en concreto, como la droga, el alcohol o… Internet.

Seguramente el prototipo de adicto a Internet más extendido es el de un joven que siempre está conectado a los programas de mensajería, a varias redes sociales, siempre está al tanto de las últimas noticias que aparecen en Internet porque tiene más habilidad como rastreador que el buscador de Google. Pero a veces se piensa también en el típico apasionado por los juegos, que pasa horas y horas delante del ordenador. Cada cual puede tener en mente muchos perfiles de adicto a Internet pero casi nunca coinciden con uno mismo.

Cuatro son los síntomas de la adicción a Internet:

  1. Un uso excesivo que provoca pérdida del sentido del tiempo
  2. Sentimientos de enfado, tensión y/o depresión cuando no tiene acceso a Internet
  3. Necesidad de más horas y más equipamiento, software, horas de uso…
  4. Consecuencias negativas por utilizar Internet: enfados, mentiras, aislamiento social, fatiga…